Elegir el color adecuado para un vestido de invitada de boda es clave y para tomar la mejor decisión, es fundamental considerar la estación del año, el horario de la celebración, el dress code y el tono de piel.
- Colores según la estación del año
Primavera y verano: Los tonos claros y vibrantes son los más adecuados. Colores como rosa fucsia, azul cielo, lavanda, verde menta o coral aportan frescura y alegría.
Otoño e invierno: Los tonos más profundos y sofisticados como burdeos, verde esmeralda, azul marino o tonos tierra destacan en bodas durante estaciones frías.
- Colores según el momento del evento
Para bodas de día, los estampados, los colores claros y vibrantes son los más adecuados. Tonos como malva, el buganvilla, azul celeste, verde agua o amarillo pastel son perfectos para eventos al aire libre o en primavera y verano. Si la boda es en la playa, los colores inspirados en la naturaleza, como el coral o el turquesa, aportan un aire sofisticado y armonioso con el entorno.
En bodas de noche, los colores más intensos y sofisticados como el burdeos, azul marino, verde esmeralda o tonos metalizados resaltan la elegancia y la distinción.
El blanco y sus variantes están reservados para la novia, y los tonos demasiado llamativos pueden resultar inapropiados.
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